miércoles, 7 de septiembre de 2011

8 DE SEPTIEMBRE DÍA INTERNACIONAL DE LA ALFABETIZACIÓN

Nota: Imagen tomada de la página oficial de la UNESCO.

8 DE SEPTIEMBRE DÍA INTERNACIONAL DE LA ALFABETIZACIÓN

Mensaje de la Sra. Irina Bokova, Directora General de la UNESCO, con motivo del Día Internacional de la Alfabetización. 8 de septiembre de 2011.

Este año, el Día Internacional de la Alfabetización presta especial atención a la relación fundamental entre la alfabetización y la paz.
La paz duradera se basa en el respeto de los derechos humanos y la justicia social. La alfabetización, fundamento de toda educación y aprendizaje a lo largo de la vida, es uno de esos derechos.
La alfabetización es un requisito previo de la paz porque entraña múltiples beneficios que revierten en las esferas humana, cultural, social, política y económica.
En las sociedades actuales, impulsadas por el conocimiento, el analfabetismo es más que nunca sinónimo de exclusión y marginación. Según las cifras más recientes (2009), son analfabetos 793 millones de adultos,
en su mayoría chicas y mujeres. Otros 67 millones de niños en edad de asistir a la escuela primaria no lo hacen y 72 millones de adolescentes en edad de cursar el primer ciclo de la enseñanza secundaria tampoco están gozando de su derecho a la educación, lo que acarrea el riesgo de engendrar una nueva
generación de analfabetos.
Esta situación inaceptable está frenando todos los esfuerzos para reducir la pobreza y fomentar el desarrollo humano. Es una violación de los derechos humanos y las libertades fundamentales, y una
amenaza a la paz y la seguridad.
La alfabetización es un acelerador del desarrollo y un vector de paz.
Primero, porque impulsa la autonomía de las personas, al dotarlas de las competencias y la seguridad en sí mismas necesarias para buscar información vital y tomar con conocimiento de causa decisiones que tienen un impacto directo sobre sus familias y sus comunidades.
Segundo, porque la alfabetización es una condición imprescindible para que los individuos participen de forma eficaz en los procesos democráticos, se hagan escuchar en las organizaciones comunitarias, adquieran conocimientos sobre política y, así, contribuyan a moldear la calidad de las políticas públicas.
Tercero, porque los programas de alfabetización fortalecen la comprensión mutua, al habilitar a las personas para compartir ideas y expresar, preservar y desarrollar su identidad y su diversidad culturales.
Ningún país puede esperar establecer condiciones duraderas para la paz si no encuentra modos de desarrollar la confianza mutua entre sus ciudadanos, a través de sistemas educativos inclusivos que fomenten la comprensión mutua, el respeto, la tolerancia y el diálogo.
Es fundamental integrar la alfabetización en los procesos de construcción de la paz para plantar las semillas de la paz, fomentar el diálogo y la reconciliación y dar a los jóvenes y a los adultos las competencias que necesitan para buscar un empleo decente.
Los premios internacionales de alfabetización de 2011 recompensan programas pioneros que demuestran el papel central de la alfabetización en la promoción de los derechos humanos, la igualdad entre hombres y mujeres, la solución de conflictos y la diversidad cultural. Todos los programas ponen de relieve que,
aun en los contextos más difíciles, los programas de alfabetización de calidad están funcionando y aportando cambios duraderos a las vidas de jóvenes y adultos.
Invertir en programas de alfabetización es una elección sensata y esencial para el desarrollo. La alfabetización es un componente clave de las estrategias para promover el desarrollo sostenible y la paz. Es fundamental para alcanzar la Educación para Todos y los Objetivos de Desarrollo del Milenio.
El mundo necesita urgentemente un compromiso político más firme con la alfabetización, respaldado por los recursos adecuados para ampliar los programas eficaces. Hoy exhorto a los gobiernos, las organizaciones internacionales, la sociedad civil y el sector privado a que hagan de la alfabetización una prioridad
política, para que todas las personas puedan desarrollar su potencial y participar activamente en la conformación de sociedades más sostenibles, justas y pacíficas.
Irina Bokova

Nota: Texxto tomado de la página oficial de la UNESCO.